viernes, 21 de agosto de 2009

Requiem

Cuando has visto que muchas cosas pasan a tu alrededor y sin embargo tu continúas bien. Cuando se te presenta la tentación de hacer algo inadecuado, pero no tienes siquiera las ganas de intentarlo. Cuando ves que eres el encargado de guiar a un grupo de personas en la busqueda de una meta, pero en ese camino encuentras barreras que debes superar para alcanzar el éxito. Cuando te dicen que eres bueno y que puedes influir en los demás de manera positiva. Hoy, me siento bien y por muchas cosas y me siento maduro ya. Me falta mucho por recorrer aún, pero siento que ya no estoy simplemente buscando que camino escoger, sino más bien buscando la forma de viajar por el camino que he escogido para llegar a mis destinos.

¿Y qué es lo que me hizo elegir correctamente?. ¿Y quién me enseñó lo que era bueno o malo?. ¿Quién espera que le defraude, o esperaba?....

Las personas que me quieren. Las personas que me forjaron, aquella que me han sido un ejemplo, una luz en mi vida, una guía en mi camino. Aquellas que me permitieron vivir, que me cuidaron mientras no podía hacerlo solo. Día tras día, buscaban moldearme para ser lo que soy. Mi madre, mi tía, mi abuelita, mi prima, mi familia entera, mis amigos.... y también alguien muy importante que hoy dejó de acompañarnos Rosita.

Gracias Rosita por todo su cariño, por todo su esfuerzo. Gracias por haberme cuidado tanto y por haberme querido tanto. Espero heberle hecho sentir en algún momento que usted fue alguien muy impotante en mi vida. Usted ha sido un dela tantas madres que he tenido... siempre le quise mucho.

Rosita descanse tranquila, que su labor la hizo con mucho éxito. No la voy a defraudar y creame aún me quedan muchas cosas que usted me enseñó. Nos da mucha tristeza que nos abandone, pero siempre que la recordamos lo hacemos con mucha alegría y cariño.

Le agradezco mucho y siempre estará una parte de usted viva en este hombre que le hoy le escribe.

Paz en su tumba.

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